top of page
Buscar
  • Foto del escritorIram Cabrera

América conquista la 14

Por: Iram Martínez




17 de diciembre por la mañana, 7 días para la navidad, unas horas para definir el campeón del Apertura 2023. La final de este torneo la disputa el equipo más grande del futbol mexicano, el América y Tigres, el equipo de la década. La cita es en el Estadio Azteca a las 19:30 horas.

No hace falta prender la televisión o leer un diario para enterarse del evento, con solo salir a la calle se siente la importancia del juego, las calles están pintadas de amarillo, los aficionados azulcremas invaden la ciudad.

Para sorpresa de nadie, el antiamericanismo también se preparaba para la cita decisiva, “mis tigres de toda la vida” se escuchaba entre un grupo de aficionados de las chivas que deseaba la derrota de su acérrimo rival. Todos, estaban a la espera de esos 90 minutos.

Pero ¿por qué esta final es tan importante? El américa disputa una final después de 5 años de fracasos escandalosos y dolorosos para su afición, pues Monterrey, Pachuca, Toluca y Chivas le robaron el sueño de añadirse un título más.

Llegamos al coloso de Santa Úrsula, faltando 3 horas y media para el inicio del partido, el estacionamiento se encontraba repleto, se sabía que era una final, pero más que un ambiente de fiesta había tensión, los rostros americanistas se sonreían unos a otros dejando ver el nerviosismo entre los dientes.

Con Fan ID y boleto en mano poco a poco ingresaban al estadio, la explanada principal estaba llena, y mientras caminabas en búsqueda de tu acceso te obsequiaban banderas amarillas para ondearlas durante el encuentro. “¡Águilas! ¡Águilas!” Gritaban los aficionados ansiosos por levantar la 14.

Niños, bebés, jóvenes, adultos mayores, familias enteras se colocaron en sus lugares a la espera del silbatazo inicial, cantaban, rezaban, se encomendaban a todo ser supremo válido para ellos que pudiera ayudarlos en tan difícil misión.

La espera terminó, el juego comenzó y los 90 minutos se sintieron como 10 minutos, la tensión que se asomaba en el estacionamiento se había apoderado de todo asistente en la cancha, 0-0, 1-1 global, el partido apestaba a los penales, los temidos penales.

Inicia el primer tiempo extra, unos ni se habían acomodado en sus lugares cuando Quiñones marcó el primer gol para el ave, el Azteca cobró vida para soltar un grito ensordecedor, menos de 40 minutos lo separaban de la gloria.

Minutos antes de terminar el primer tiempo extra, Richard Sánchez le regaló al americanismo un destello del talento que lleva y colocó el 2-0 para los locales. Era el gol que aseguraba la 14, la tribuna y el rival lo sabían.

Los siguientes 15 minutos fueron de trámite, el Coloso cantaba al unísono “Campeón, campeón, ole, ole, ole, ole, campeón, campeón” y en la última jugada del partido llegó el “cabecita a puerta” para terminar el encuentro con un aplastante 3-0 que le daba al América su 14 copa.

La espera había terminado, el americanismo celebraba eufóricamente el título, aficionados se abrazaban entre extraños y conocidos, todos compartían la alegría de ser campeones, los ojos de los azulcremas se iluminaban entre lágrimas que vislumbraban el amor por los colores del equipo más grande de México.

Una vez más las Águilas del América se colocan como los mejores del torneo mexicano, se separan 2 copas de su acérrimo rival y en palabras del dueño, Emilio Azcárraga, se preparan para traer la 15 porque para el americanismo nunca es suficiente.

13 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page